No mires atrás de Jaye Ford.

            Contraportada.           

"Ese año se iban al norte,

las cuatro solas una vez más.

Era una fría noche de viernes de invierno

y Jodie sonreía al volante del coche,

viendo desaparecer en el retrovisor

las luces del último pueblo.

Unos jirones de niebla envolvían los

matorrales a ambos lados de la carretera,

y los faros del coche perforaban

la oscuridad abriendo un pasadizo extraño

e inquietante, como un túnel capaz

de atravesar el laberinto nocturno

para llevarlas a un lugar seguro.

O directamente al infierno."

                 ¿De qué va?               

La escapada anual de Jodie y sus amias Hannah, Corrine y Louise no parece haber empezado con buen pie. todo un año esperando a dejar por unos días a sus respectivas familias para que, a las primeras de cambio, un conductor las eche de la carretera, después, el taxi y la grúa se retrasan demasiado mientras ellas aguardan a la intemperie en la oscuridad; y para rematarlo, después de que el ex policía Matt Viseman las lleve por fin al pueblo, Jodie sufre un intento de acoso en un bar por parte del tipo menos recomendable del lugar. Así que no es de extrañar que cuando por fin llegan al coqueto granero rehabilitado en el que pasarán el fin de semana, Jodie esté de un humor de perros.

Su desasosiego pronto se verá acrecentado por algo más, algo que procede la casa misma, tan alejada de la civilización, cuyo peligro ella parece ser la única en percibir. Siendo joven, Jodie fue víctima de una agresión, y desde entonces a menudo ha mostrado una actitud casi paranoica ante cualquier cosa que se salga de lo habitual, por lo que no es de extrañar que sus amigas no hagan mucho caso de sus recelos pero en esta ocasión Jodie tiene miedo, un miedo cerval. Sabe que las están vigilando que, oculta y en silencia, alguien aguarda, un depredador que solo está esperando la ocasión propicia para darles caza.

                         ¿Qué me ha parecido?                    

El libro transcurre en un fin de semana y la acción del secuestro en apenas unas pocas horas de máxima tensión que ocupan el 60% de la novela. Desde la primera página la sensación de peligro y la ansiedad de la protagonista me ha contagiado y me ha mantenido en vilo hasta que he terminado de leerlo. Son más de cuatrocientas páginas de continua tensión, sin apenas descanso.

Esta escrito con un ritmo rápido y atrayente que te mantiene pegada al sillón durante cada una de su páginas.

Desde el principio se empatiza con la protagonista, tras conocer el incidente que la dejo marcada, de lo cual se habla desde el principio, te pones en su piel.

Los personajes están muy bien elaborados, cada uno es totalmente diferente. La protagonista, Jodie, es una superviviente, una mujer que por haber vivido lo que ha vivido se ha vuelto muy cautelosa, tiene miedo constantemente pero es muy fuerte. A lo largo del libro la vemos luchar con sus pesadillas del pasado a la par que intenta que todos salgan de allí con vida.

En las demás mujeres no se profundiza mucho, se pasa ligeramente sobre sus caracteres y sus actitudes, lo justo para justificar algunas de sus palabras y actos.

Matt, el ex poli, esta atormentado por no haber podido salvar a unos inocentes unos meses antes, a perdido totalmente la fé en si mismo y no se cree capaz de poder ayudar a esas mujeres. Pero no hay nadie más que él para sacarlas de allí.

Si hay algo que me ha sorprendido de la novela y me ha hecho silbar de admiración es la fuerza y la voluntad que, tanto Jodie como Matt, han demostrado. Y es que un subidón de adrenalina puede hacerte mover montañas.

El libro es apasionante. Ha sido nombrado International Book of the Month (Libro internacional del mes) ya había leído antes libros que tenían esta mención y siempre son magníficos.

He lamentado mucho terminarlo, a pesar de sus más de 400 páginas, me ha sabido a poco. Hacía tiempo que no leía un libro que me cautivara tanto. Sinceramente deseaba que no terminara jamás.

                     Diálogos, citas y frases.                        

"-Hola, chicas. Una noche preciosa.

A Jodie se le heló la sangre. La voz era masculina y su camaradería -allí fuera, de noche, en lo alto de una colina deshabitada- sonaba como una amenaza."

"Jodie desplazó la vista al otro lado y vio los vaqueros del hombre que la encañonaba con la pistola. Llevaba una manda oscura en la parte delantera, debajo de la rodilla.  Encima estaba la mano izquierda de Jodie, empapada de sangre."

"Ya era bastante difícil admitir ante si misma que tenía un problema sin tener que explicar en voz alta ante las demás que tres sádicos asquerosos aún la retenían en su poder, dieciocho años después de haber cortado las ataduras de sus muñecas."

"...se grabó en la memoria aquella boca delicada, las arrugas del contorno de sus ojos, que tanto le habían gustado. Trató de recordar el color de aquellos ojos. También le habían cautivado. Eran verdes, con otra tonalidad más clara que brillaba bajo los rayos del sol.

Y entonces vio ese color y recordó que era bronce. Y lo vio porque Matt había abierto los párpados y estaba mirándola directamente."

"...Él la rodeó con el brazo por la cintura cuando empezaba a separarse, tiró de ella hacia sí y le devolvió el beso. A diferencia del suyo, no fue un beso rápido pero sí igual de tórrido y desesperado, le tomó la cara con una mano y la abrazó con la otra. Un primer beso maravilloso, maldita sea."

"-No pienso dejar a mis amigas. Voy a quedarme aquí y vamos a encontrar otra manera de sacarlas de ahí dentro."