El Diablo en Invierno de Lisa Kleypas.

¡Hola a todos! Hoy os voy a hablar de El Diablo en Invierno, el tercer libro de la saga Wallflowers. Este es mi favorito de todos. Al final de Sucedió en Otoño hay una pequeña introducción a este libro que, al menos en mi caso, hizo que los meses de espera para su publicación se me hicieran eternos. Gran acierto por parte de los editores.

                         ¿De qué va?                         

Evie Jenner es una muchacha tímida y tranquila, a quien todos los caballeros esquivaban por su gran timidez y su constante tartamudeo.

Su madre murió al darla a luz y su padre, propietario de un club de juegos, la dejó con unos parientes maternos, los cuales maltrataron y despreciaron a la pobre niña como venganza por la huida de su madre.

Una noche, cansada de los continuos maltratos y de la perspectiva de tener que casarse con el mimado y repulsivo de su primo, Evie huyó de la casa familiar en busca de su libertad.

Sebastian, lord St. Vicent estaba al borde del desastre económico. Los cobradores lo atosigaban y tras su intento fallido de conseguir a la heredera Lillian Browman parecía que toda la esperanza de recuperar su estabilidad económica había desaparecido. Entonces Evie apareció en su casa con una propuesta imposible de rechazar.

Salieron rápidamente y se casaron en Greta Green. Evie había puesto muy pocas condiciones a cambio de poner en manos de Sebastian la gran dote que poseía. Ella podría hacer lo que quisiera, dispondría de su propio dinero y solo se acostarían una vez para que el matrimonio fuera legal y nunca más. No tenía miedo del sexo pero si de que le partieran el corazón. Y Lord St. Vicent tenía fama de ser un rompecorazones. Sebastian no puso objeciones a sus condiciones, necesitaba urgentemente el dinero que ella le proporcionaría y no tenía ningún inconveniente en no acostarse con ella. O al menos eso creía porque una vez que se dio cuenta de que era su mujer una ansia posesiva se apoderó de él.

Por su parte, Evie, no piensa renunciar a ninguna de sus condiciones por mucho que se sienta atraída por él, Sebastían tendrá que demostrar que ha cambiado si quiere un matrimonio de verdad y Evie tiene claro lo que quiere que haga para ello: Celibato, algo que Sebatian jamás ha probado antes.

                                           ¿Qué me ha parecido?                                           

Este es el que más me ha gustado de toda la saga. Aunque de cierta manera he tenido un pequeño conflicto con el personaje principal. Sebastian en el libro anterior era el villano y en este es el galán, hacen falta bastantes páginas y muchas explicaciones para poder olvidarte de las sensaciones que te dejaron el otro libro sobre este personaje. Y poco a poco se consigue perdonarlo y disculparlo por sus acciones, al igual que los personajes del libro, que finalmente deciden perdonarlo.

Este libro se diferencia de los demás en que apenas aparecen las otras protagonistas de la saga y que no transcurre en la hacienda de Westcliff. Además hay menos humor y la trama es algo más tensa debido a los maltratos sufridos por Evie y a la enfermedad de su padre, además de un par de cosas más que me reservare para no hacer spolier. Solo decir que es más serio que los libros anteriores.

La relación entre los personajes principales, Evie y Sebastian, es preciosa. La evolución de su relación es lenta y llena de grandes momentos de pasión. Sin lugar a dudas es el libro más apasionado de toda la saga.
También aparecen nuevos personajes secundarios, como Cam Rohan, al cual no se le ha explotado todo el potencial que podía tener en el libro, aunque a este lo volveremos a ver en la saga Hathaways. (Que empezaré a leer lo antes posible).
Al igual que todos los libros de Lisa Kleypas, la lectura es muy fácil y rápida. Esta escritora tiene un don maravilloso para hacernos adentrarnos en la historia y avanzar junto a los personajes a un ritmo y fluidez perfectos.

                                           Diálogos, citas y frases.                                            



"...levantó un poco el cuerpo para deslizar una mano entre ambos y acariciarle su pubis húmedo e incitarla con destreza. le provocó un nuevo clímax, y con su cuerpo frotó voluptuosamente la entrepierna de Evie.

Luego, jadeante, levantó la cabeza para mirarla como si fuera una variedad de ser vivo desconocida.

- Dios mío- susurró con una expresión que no era de satisfacción sino de algo parecido a la alarma."

"- No te quites ni una sola peca, cariño. He encontrado algunas en sitios de lo más encantadores. ya tengo mis favoritas. ¿Quieres saber donde están?"

"...no tengo ningún inconveniente a que tengas amantes. Es sólo que no quiero ser una de ellas. El acto sexual no significa nada para ti, pero si para mí. No quiero que me lastimes, y creo que eso sería inevitable si aceptara acostarme contigo."

"-Te deseo más que nada en este mundo- musitó Sebastian antes de inspirar entrecortadamente-. dime qué tengo que hacer para que yazcas conmigo.

Evie lo empujo en vano, incapaz de zafarse de aquel cuerpo estimulante.

- No lo conseguirás- susurró-. porque lo que querría es lo único que no podrías darme: que me fueras fiel.

- Podría- contestó el con demasiada rapidez.

Olia a falsedad.

- No lo creo- susurró Evie.

El le cogió la cara entre las manos y le acarició las mejillas con los pulgares, las bocas casi tocándose.

- Evie, no podré cumplir nuestro cauerdo. No puedo vivir contigo, verte todos los días y no tenerte. No puedo..."